domingo, 9 de diciembre de 2012

Cordura

Voy a esperar que te duermas. Voy a irme sin más. Voy a correr hacia mi futuro sin detenerme en este presente. Me queman los pecados cometidos este año, pero solo quedan días para que mi pena termine. Si tus ojos se clavaran en mi me atarían, me atarían para siempre y no quiero volver. Déjame huir sin darte una explicación, ya no creo en milagros, ya no creo en mi. Creo en tu sucio poder para cambiar las cosas para decir lo que quiero oír y darme lo que quiero recibir, para manipular mi débil corazón. Para destruirme desde dentro para tirarme y no levantarme.

 Dejame huir sin respirar, atame con tus brazos y no me sueltes, no me dejes. Torturame de una vez y dejame marchar. Clava esos malditos ojos en mi y quemame por dentro

viernes, 7 de diciembre de 2012

descifrar

A irme para volver, ese es mi propósito. Pienso abandonar este mundo para volver a el cuando crea que  puedo llegar a comprender lo que me espera o lo que me toca. Al fin y al cabo me merezco todo esto, pero aún...aún no lo he comprendido. Necesito aislarme, destruirme y reconstruirme para volver a disfrutar, o para volver a sufrir da igual que mas dá. Vivir ese es el objetivo, el pudrirme hasta que seas tu o yo, o tu y yo. Eso sería lo correcto, esperar, dejarte llevar, sentir, soñar.

Pero no se, sentir empieza a ser raro empiezo a quemarme por dentro, desintegrarme. Empiezo a no parecer yo, al menos no el yo que creia conocer, o quería creer conocer.

Y sacar un último aliento, sería quizás la mejor de mis ofrendas a este mundo. Respirar lo que me corresponde, sin utilizar mas de lo debido, dejando así la posibilidad de albergar vida dentro de esta tierra hostil

Pero desgraciadamente es la coraza del destino la que me pongo hoy para combatir, la coraza que me aísla de todo. No me protege de lo de fuera, les protege a ellos de mi. Hoy tu podrías decidir alejarte, o puedes decidir acercarte más a mi. Yo no pienso decidir sobre el destino, no pienso pararme a malgastar ese tiempo. Seguiré caminando con la noche mi dulce amante, esperando sacar mi último aliento, mi última ofrenda a este mundo